Despertar el alma
Desde temprana edad encontré en la escritura un refugio, un rincón donde volcar lo vivido, lo sentido y lo callado. Aprendí a gritar con palabras escritas en hojas sueltas, a sanar con tinta lo que el alma no podía decir en voz alta.
Hoy recojo aquellas voces del pasado, las rescato del olvido y las estampo en estas páginas para compartirlas con ustedes.
Que disfruten la lectura sin ver, sin oír… tan solo con el sentir.
Yisela.