Reseña

Los sonidos del silencio no solo revisita un período oscuro del pasado reciente en Uruguay sino que también da cuenta de las maneras hasta sutiles en que la música, la radiodifusión estatal y sus trabajadores vivieron, resistieron o reprodujeron el autoritarismo.
Este libro interpela al lector desde la primera página. Lo hace no solo por el rigor de la información que ofrece sino también por la manera en que pone en cuestión algunos de los lugares comunes más extendidos sobre la música durante el período dictatorial. ¿Realmente estuvo prohibida la música en inglés? ¿Qué géneros fueron promovidos y cuáles excluidos? ¿Cuáles eran los criterios reales –y simbólicos– que regían la programación musical del SODRE? ¿Qué papel jugaron los funcionarios, los artistas, los técnicos, los programadores en la reproducción –o la resistencia–a esa política cultural autoritaria?
Al responder a estas preguntas, la autora desafía el mito del “apagón cultural” y desmonta, con evidencia y sensibilidad, una visión dicotómica que ha predominado en muchos relatos sobre el período. Nos muestra cómo la dictadura no impuso un vacío, sino una reconfiguración estratégica de lo audible y lo decible, privilegiando ciertos géneros y mensajes sobre otros, instrumentalizando al arte como herramienta ideológica y, a la vez, generando un espacio ambiguo donde ciertos márgenes de acción eran posibles incluso bajo vigilancia.