Reseña

En ese umbral entre la memoria y el presente, entre lo
que fuimos y lo que aún podemos ser, los relatos de
El último destello iluminan con delicadeza las
emociones más profundas del alma humana.
Marianella Medina nos invita a mirar con ternura y sin
temor el paso del tiempo. Cada cuento —con su ritmo
sereno y su hondura emocional— pone en valor la
sabiduría, la vulnerabilidad y la fuerza que habitan en
la adultez mayor. Son historias de silencios y de
encuentros, de pérdidas que abren puertas, de gestos
cotidianos que contienen una vida entera.
Una dulce sonrisa, un recuerdo que se escapa, un
banco en la plaza, un reencuentro tardío o una
despedida agradecida… Cada relato es un espejo para
reconocernos, una caricia para quien ha vivido mucho
y sigue buscando sentido.
El último destello no habla de un cierre, sino de ese
instante en que la vida, en su madurez, revela con más
nitidez lo que importa.