Reseña

Cuatro amigos y una pequeña traviesa protagonizan esta historia al comienzo de vacaciones de julio. Lucas, quedó muy interesado por un tema sobre un naufragio del año 1812 que se conversó en la escuela justo el último día de clases. Sabiendo que los adultos estarán muy ocupados en esos días, se prepararán para visitar al abuelo Manuel, gran aventurero y dueño de un gran tesoro familiar, con la idea de ir al rescate de un elemento casi imposible.
Viajarán en el tiempo a través de un portal energético, conocerán el poder de la luna y piedras semipreciosas. Pero lo más impactante…estarán presentes en la embarcación “Salvador” en el año 1812, para tratar de conseguir lo que fueron a buscar.
¿Podrán regresar todos, lograrán su objetivo?
“La autora quiere destacar en esta novela la unidad de la amistad, el compromiso, la búsqueda por lo patrimonial. Sin perder la visión de ser una aventura divertida, con misterio, uniendo realidad y fantasía para inducirnos en una temática histórica. Interesar a los jóvenes lectores, en un mundo tan real, como mágico”.