Reseña

Este libro indaga en los procesos de transformación de la Iglesia católica uruguaya en el contexto de la sanción y la posterior puesta en vigencia de la Constitución de 1919, que separó a la Iglesia del Estado. A través de un relato ameno, la autora reconstruye las iniciativas del catolicismo, que comenzó a «marchar solo frente al pueblo». Se describen las tensiones que lo atravesaron durante la década del veinte hasta la conformación de la Acción Católica en 1934, presentando un catolicismo activo, dinámico y en movimiento. En este sentido, se da cuenta del proceso de reorganización institucional en sintonía con las dinámicas de centralización y transnacionalización del catolicismo de la época, de la expansión de la estructura parroquial, del disciplinamiento del clero y de la necesaria reconfiguración de la jerarquía eclesiástica dentro del nuevo estatus constitucional. Asimismo, se analiza el papel protagónico —y dinámico— desempeñado por laicos y laicas por medio de las numerosas organizaciones tributarias del catolicismo social, que se volcaron con frecuencia hacia los espacios públicos.
La autora, a través de un exhaustivo análisis de fuentes diversas, entre las que se destacan aquellas provenientes de los acervos del Archivo Apostólico y de la Secretaría del Estado Vaticano, pone en discusión la interpretación hegemónica sobre la «Iglesia gueto» de los años veinte, refugiada en una campana de cristal y alejada del espacio público luego de la separación constitucional. A contramano de estas interpretaciones, el libro de Carolina Greising coloca el énfasis en un catolicismo activo, alejado de una actitud de repliegue y letargo.