Beckham nunca conoció Durazno
Y otras historias insólitas del fútbol uruguayo
Un jugador comprado a cambio de 500 costillas de carne, un partido con entradas a un peso, una mujer que jugó en un equipo masculino, un espectador que hizo de juez de línea para salvar un partido, un pase puente que terminó con una estrella mundial jugando en Central Español, el insólito pacto de palabra entre Nacional y Peñarol que le impidió a uno de los equipos ser campeón, el verano en que Maradona quiso comprar la IASA, el torneo oficial que el Deportivo la Coruña jugó en Uruguay, la vez que un equipo jugó tres partidos en un mismo, o cuando Cerro defendió a Nueva York en el fútbol de Estados Unidos.
Estas son tan sólo algunas de las increíbles historias que Miguel Méndez recupera en un divertido libro que refleja el costado más pintoresco y honesto del fútbol uruguayo.