Los colores de un país
De sueños y pesadillas
Describir con palabras el contraste entre la belleza y la locura de las cosas que pasan en el país en el que naciste, y en el cual ya no estás, es una tarea difícil. Hacerlo en forma de poemas es una tarea, quizás, más difícil. Pero un manto de esperanza aparece por haberlo intentado, para dejar en la memoria todo eso que abruma y que arremete, pero también, todo eso que alienta y ayuda a seguir andando. Así, tal vez, pueda ayudar a sanar las heridas de un pueblo, que durante siglos, ha sido saqueado y violentado.