Testigo de piedra
El hallazgo fortuito de un adolescente consigue despertar en todos los habitantes de un pequeño pueblo del norte del país, un fantasma dormido.
Las historias vinculadas son legendarias y los testigos presenciales muy escasos como para aportar un poco de luz en misterios que involucran a casi todos los descendientes de aquellas épocas, la mayoría residentes actuales del lugar.
La región fue de las preferidas para algunas tribus charrúas que todos los años la elegían para su temporada de invierno y, en la actualidad, puede apreciarse su tenue descendencia en algunos de sus pobladores.
Para desentrañar de una vez por todas las historias tejidas tendrán que abrirse viejas heridas y volverán a escucharse viejos testimonios.